¡Vuelve la Clase B de Primera para Todos! (a propósito de District nine)

Buenas a todos! La peli de la que hablamos hoy aplica como nunca a aquello de "recibió elogios entusiastas o críticas devastadoras" Y como acá, en nuestra modesta medida, nos gusta fomentar tanto el debate como el conocimiento d eotras posiciones y a mí me gusta reconocer a los que tuvieron el ojo en el parche antes que yo acá citaré un par: Entre las opiniones en contra podemos citar la del amigo Frevier en su blog (http://cinematofilos.com.ar/2009/10/la-excusa-de-los-extraterrestres.html) y la lapidaria nota del afamdo D'Espósito en el diario Crítica: http://criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=31259

Entre las favorables podemos contar la de el siempre rendidor Brian Macchi en Fancinema http://www.fancinema.com.ar/estrenos/distrito%209.html y la tempranera del amigo de la casa Nanu: http://amandolaspeliculas.blogspot.com/2009/09/doble-review-district-9-orphan.html
Personalmente, van a notar que estoy mucho más cerca de las últimas que de las primeras, pero cada uno tiene lo suyo a la hora de leer una peli, ya lo decía Don Perogrullo: "En la variedad está el gusto"

El regreso de la ciencia ficción contrabandista:
Desde sus inicios, la ciencia ficción cumplió la función de mostrar realidades alternativas no solo desde la fantasía sino desde lo social y lo político. Muchas veces denunciando al realidad existente pero siempre bajo el ropaje de la fantasía, al imaginación, el divague. Sin ir más lejos, la que muchos consideran la primera historia de ciencia ficción "Somnio" de Kepler era presentada, desde el mismo título, como un sueño. En "micromegas" Voltaire mostraba unos habitantes de Saturno y otros planetas que veían a los humanos y sus sociedades como rozando la estupidez.
Así, pese a su propio rótulo (ficción) la SF siempre contrabandeó, por decirlo así, "Realidad"


La Clase B: (poca plata y muchas ideas)
En esto, la clase B jugó siempre un papel destacado. Desde "el día de los trífidos", pasando por "La guerra de los mundos" hasta llegar a la genial y muy pobretona "Sobreviven" se trataba de decir mucho con poca plata. Y, es cierto, ese puede ser un defecto pero es, sin dudas, la mayor de sus virtudes. Probablemente "Sobreviven" de Carpenter sea genial en ese sentido, como último exponente del género: Unos cuantos anteojos negros, unas cajas de cartón rellenas de bolita de telgopor, radiografías y muy poco más construían no solo una atrapante historia de ciencia ficción sino también una (muy poco) velada crítica de la sociedad actual.

District Nine o el regreso del espíritu chatarrero:
retoma ese estilo que estaba abandonado (no tanto el de la crítica social sino el "chatarrero") y lo lleva a fondo. Es más, la misma película pareciera tener plena conciencia de sí cuando dedica minutos y más minutos a un ambiente chatarrero. El grueso de la peli se conduce a través de "chatarra" (Desde la misma nave alienígena abandonada)
De hecho, toda la supermoderna tecnología extraterrestre es chatarra para los humanos que no pueden utilizarla. Inclusive los propios cuerpos de los "marcianos" al no encajar en la sociedad
terrestre también son "chatarra" (en tanto fuerza de trabajo inutilizable)


D9 o "El AntiSpielberg":
Y con esto no me refiero a que la película tenga tanta entidad como para discutirle al cine de Spielberg. Tampoco a que el director sea tan malo que sea un anti Spielberg. Me refiero a una evidente intención impugnadora de obras como "en cuentros cercanos del tercer tipo" y buena parte de la Sci Fi norteamericana. Los marcianos no vienen a invadir ni traen la cura de las enfermedades... es como la anti-Encuentros cercanos del tercer tipo :P y también anti-Día de la independencia o final "Batlle earth" o cualquiera de esos bodrios
Ni a conquistar ni a civilizar, mas bien parece que se perdieron los pobrecitos... Pero no es el único mérito...


District Nine o District Earth?
Todas las críticas acentúan el parecido d e la peli con el Apartheid sudafricano, o, al menos, el intento d e contar esa historia. Obviamente no voy a negar las referencias ni las "obviedades" que señalan los críticos críticos. Pero creo, y creo que no soy el único, que a una peli hay que verla no solo por la intención dle director o el estudio sino por lo que realmente consigue. Esta es otra verdad de perogrullo a estas altura y es que una obra es tal independientemente de las intencionalidades dle autor. Y sí el sudafricano Neil tuvo intención de satirizar y criticar el estado de cosas de su país, logró algo aún más fuerte ya que como decía el viejo Tolstoi "pinta tu aldea y pintarás el mundo"
Porque un mundo donde miles (o millones o miles d emillones) están condenados no solo al hambre y a la perdida de sus derechos "inalienables" o a la cacareada "dignidad humana" sino a su inutilidad como "herramientas", como fuerza de trabajo, es un mundo que no suena muy futurista ni "ficticio" sino bastante real. Los aliens son definidos como "workers"pero que están perdidos sin directivas ni nada. Son "Trabajadores" pero sin posibilidades de inserción en una sociedad en la que son una molestia. El triste espectáculo de capacidades (humanas y materiales) ociosas no es algo que nos resulte muy lejano.

Además se maneja muy bien el otro cultural Es decir, ni los personajes ni la cámara ni uno mismo termina de entender a los marcianos. La cámara los sigue, pero esa cámara "falso testigo" que puede o no ser fallida, cumple aquí su efecto. Efecto d e incomprensión. Tampoco el guión ayuda: no sabemos porque los "langostinos" (como los llaman) hacen lo que hacen. Nunca se terminan d ecomprender, son verdaderos extraños.
En una escena clave del final, los alienígenas intervienen activamente sin que siquiera el protagonista pueda llegar a comprender su acción.
Ahora bien, esa no es una imagen nueva de los trabajadores. Muchas veces estos son vistos como una masa desamparada a la que, en última instancia no se entiende. La alternativa entre esa visión y una en la que son los protagonistas está presente en la película sin que llegue a resolverse. Ese límite dle realizador es un límite presente en la realidad, el no lo resuelve, pero, con o sin intención, lo plantea, aún en la falta de resolución. Y ese no es un mérito menor d ela película: plantear un problema aunque no llegue a resolverlo...